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APLASTAMIENTO DE LAS GOTAS - Cortázar



Yo no sé, mira, es terrible cómo llueve. Llueve todo el rato, afuera tupido y gris, aquí contra el balcón con goterones cuajados y duros, que hacen plaf y se aplastan como bofetadas uno detrás de otro qué hastío. Ahora aparece una gotita en lo alto del marco de la ventana, se queda temblequeando contra el cielo que la triza en mil brillos apagados, va creciendo y se tambalea, ya va a caer y no se cae, todavía no se cae. Está prendida con todas las uñas, no quiere caerse y se la ve que se agarra con los dientes mientras le crece la barriga, ya es una gotaza que cuelga majestuosa y de pronto zup ahí va, plaf, deshecha, nada, una viscosidad en el mármol.

Pero las hay que se suicidan y se entregan en seguida, brotan en el marco y ahí mismo se tiran, me parece ver la vibración del salto, sus piernitas desprendiéndose y el grito que las emborracha en esa nada del caer y aniquilarse. Tristes gotas, redondas inocentes gotas. Adiós gotas. Adiós.



Julio Cortázar

jueves, 24 de diciembre de 2009 12 Comentarios

Un abismo en el hígado al modo de los griegos

LUCIO FONTANA,
CONCETTO SPAZIALE




Mi cuerpo como
concepto como animal desgarrado-

roto | como una emoción

/proyección derramada/

-un hilo- como
un latido,
la vida
un suceso.




sábado, 5 de diciembre de 2009 20 Comentarios

"Do you be?"


ART

as the
spirit
wanes
the
form
appears


Charles Bukowski

Cindy Sherman, untitled

jueves, 26 de noviembre de 2009 13 Comentarios

Sonido abstracto de jarrones rotos

Aquí aquí aquí. Una cascada de palabras estalla contra la roca uniforme y suenan atolondradas las tristes golondrinas, en su vuelo lejano.

Aquí aquí aquí. No pienso, subo y subo, cabalgo sin movimiento, el estatismo afloja sus cuerdas y me quedo aquí aquí aquí.

Más tarde nos queda el Hobo; nunca aquí aquí, si no, más tarde y un poco más allá.

Más allá, más allá, más allá:
soledad y rodillas; rodillas peladas en el asfalto de la subida: una cuesta de sonidos. Una traslación, una simple traducción, palabras palabras palabras, más allá de donde esta el Hobo y nada más.

Siempre nunca siempre; ahora cambia el ritmo y me quedo de nuevo aquí aquí aquí sin una respuesta que de coherencia a un discurso vacío. Son ecos y redobles, luego, la pausa, y de nuevo, un desfile de columnas agrietadas por el peso del agua.

Más grita el ruido, más grita, y la voz grita, y calla, y grita, y calla. Más.

Aquí aquí más allá siempre nunca y luego de nuevo grita y rompe el esquema: cada palabra un verso.
No hay vacuidad en el orgasmo mudo que profieren los objetos muertos.

Sólo la mirada abyecta en filigranas de sangre, sólo sólo nada más, aunque se desee morir en colores, como los que no se ven ni tampoco se sueñan, en la multifonía de la oquedad traslúcida del cálido vientre original.


Portinari

viernes, 13 de noviembre de 2009 16 Comentarios

HERE IN MY ARMS




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Words like violence


Break the silence


Come crashing in


Into my little world


Painful to me


Pierce right through me


Can't you understand


Oh my little girl


All I ever wanted


All I ever needed


Is here in my arms


Words are very unnecessary


They can only do harm


Vows are spoken


To be broken


Feelings are intense


Words are trivial


Pleasures remain


So does the pain


Words are meaningless


And forgettable


All I ever wanted


All I ever needed


Is here in my arms


Words are very unnecessary


They can only do harm













lunes, 9 de noviembre de 2009 8 Comentarios

Viviría en cada número de esa escalera variándolos por minutos y días de la semana.
Porque parece que suben al cielo, invisibles.
Porque me he escogido esa casa, para vivir, en un campanario que sólo yo imagino a partir de una reliquia.
Del sonido de una campana.

Después del tiempo no queda nada.
Después de los números nadie distingue conclusión.

Quedan las escaleras eternizadas. Los números invisibles.
La línea que es límite, y a la vez ilimitada.

Vivir en las líneas de los números, como si fueran manos. En la extrañeza de las manos no hay números.
Sin números no hay tiempo. Sin tiempo nada concluye.
Sin conclusión no puedo ni renegar ni reafirmar mi existencia. Sólo existirla. Existirla. Dentro de cada línea imaginaria.

*****************************(Foto: Fibonacci number sequence, Mario Merz)



Portinari, Fibonacci number sequence -or question-


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"Pero el coronel siguió mirando y todo le resultaba maravilloso, y lo emocionaba, igual que cuando tenía dieciocho años y vio aquel panorama, por primera vez, sin comprender nada, sabiendo solamente que era muy bello."

Ernest Hemingway, Al otro lado del río y entre los árboles





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"El abismo son las profundidades infernales, los ínferos, los mundos inferiores, el abismo es el jaos, aquella boca siempre abierta de la que los seres emergen tan sólo si la luz roza la materia primordial. Vibrando. La materia informe haciéndose luz al vibrar. Y en la luz diferenciándose. Ser es salir a la luz, nacer es arrancárse a la oscuridad. Así pensaban los antoguos griegos: los seres emergen a la exisencia al conformarse la luz. Ser es existir."

[...]

"Jaisalmer puede ser cualquier lugar; cualquier lugar puede ser Jaisalmer. Un lugar donde el vuelo extremadamente sedoso de las bandadas de palomas nos alcance sin apenas rozarnos.


He llegado al final del camino. El final del camino es un desierto con un centro."

[...]

"Los monos no viven en los desiertos."

[...]

"En Jaisalmer hay una vaca ciega. La piel de sus párpados creció de tal forma que ha tapiado los pozos de su mirada. Esta vaca ciega es mi desierto. Tras esos párpados diríase que el agua profunda es llanto contenido, o tal vez una seca inmensidad, túneles que acaban en las entrañas. La visión interior es oscura, los sonidos, intensos."


Estractos extraídos de Diarios Indios de Chantal Maillard.

sábado, 17 de octubre de 2009 23 Comentarios

Despiértate hacia el sol

Un cuerpo. Sólo somos un cuerpo.
A veces, un pétalo
De lágrimas.

Debajo de los párpados se espera un beso. Mejor: lo que hay más allá del beso. Los labios y su movimiento, sobre las cumbres insondables de una boca.

Un beso como pétalo. Un cuerpo como pétalo.
Somos la conjunción de carne, tiras de huesos; y un beso. Somos un pétalo.

Más allá de la poesía quizás el silencio. Pero más allá de una palabra, nada. Las profundidades del verbo son pétalos, desprendidos de la flor más hermosa. Llorados como el origen de su caída.
Más allá del pétalo hay un cuerpo. Y si el cuerpo es un pétalo, más allá, entonces, nada.

viernes, 25 de septiembre de 2009 28 Comentarios

Allí se quedó

Virginia. Puedo tocar tu perfil, con cada letra de ese nombre, que no te posee, sin embargo. Como a ninguno de los que pisan la tierra. Mudos y sin bautismo.
A Virginia se la puede tocar con una uve. Con la Uve que se circunscribe en la Eme de Melancolía. Mayúscula, porque se elude en sus labios. Puede darse con una caricia, en el perfil ausente de Virginia.
En los labios esconde la simetría del rostro. En cada voz que no pronuncia puedo escribir el color de unos ojos que no conocí ni yo, ni la señora Dalloway.
Podría acercarme con una palabra, con un prisma que esconde luces, o flores inclinadas. Podría acercarme con cualquier cosa que estuviera al alcance de mi memoria.
Alargo una mano; acaricio el cabello apagado, ausentado durante largas sucesiones de eso que llamamos tiempo. Las arrugas del cuello se perciben con sutileza, bajo la cadena de oro. Y Virginia me mira con cada letra de su nombre, tatuado en el mechón de pelo que no recoge.
Mientras podríamos adivinar, que sus manos se posan sobre los huesos marcados de sus rodillas, que forman una uve vertical, y que, sólo entonces, ella huele a flor inclinada.
Las sombras bailan por la garganta blanca de Virginia. Por el hombro derecho de Virginia. Por los encages de su vestido blanco. Por debajo de su nariz y su boca, acariciando sus párpados y oído.
Virginia se sienta en su uve. En cada famélico hueso de su cuerpo deposita su carga emocional. Una palabra ya acuñada en el caracol de su oreja.
Una roca se cuelga de su frente, pendiente de las fuentes que emanan de las garras de una Moira.
Y antes de que gire lentamente su cara, encuentra, más allá de su mirada, el punto donde, labios y ojos se paralizan en su inmortalidad. Como si soplara un fuerte viento, y ninguno supiera lo que barren, entre sí, las hojas.

miércoles, 16 de septiembre de 2009 18 Comentarios

EN LA RUEDA SOLAR

Cada ojo en el fondo es una cripta donde se exhuma el sol,
donde brilla la luna sobre la piedra roja del altar
erigida entre espejos y entre alucinaciones.
Yo asisto cada día con los ojos abiertos al sacrificio de la resurrección,
a la alquimia del oro en aguas estancadas.
Es difícil mirar con la sustancia misma de la luz filtrada por la tierra del destierro;
es imposible ver quién se levanta y anda entre malezas
desde estos dos fragmentos arrancados a la cantera de la eternidad.
Uno al lado del otro en su prisión de nácar,
en su evasión de nubes y de lágrimas;
uno ajeno del otro,
sometidos a ciegas a la ley de la alianza en la separación,
fabulan la distancia, la envoltura de cada desencuentro, la isla que no soy.
¿Y acaso no me acechan desde el fondo de todo cuanto miro
igual que a una extranjera?
¿No me dejan a solas con su estuche de nieblas,
lo mismo que a un rehén,
contra la trampa abierta en la espalda del mundo?
¡Extraña esta custodia que permite avanzar al enemigo transparente
y retiene hacia adentro este insondable vacío de caverna!
No tiene explicación esta córnea con piel de escalofrío,
con avaricia de ostra que incuba al mismo tiempo su misterio y el cuchillo final;
tampoco es razonable este iris que tiembla como una flor al borde del abismo,
que destella y se apaga lo mismo que un relámpago de tigres,
que se acerca y se aleja semejante a una selva sumergida en un ala de insecto.
¿Y la pupila, entonces?
¿Quién puede descifrar esta pupila cautiva entre cristales,
este túnel contráctil siempre alerta a la inminencia a solas,
esta palpitación a medias con la muerte?
¡Basta, mirada de fisura, incesante mirada de pólipo en tinieblas!
Es otra vez el mismo tembladeral de aguas voraces,
la misma negra rampa circular que me pierde hacia adentro.
Es otra vez el mismo recinto central adonde caigo
arrastrando un telón sobre la lejanía,
entreabriendo la escena donde los personajes son una sola máscara de Dios.
Es otra vez el mismo centinela que dice que no estoy,
la misma luz de espada que me empuja hacia afuera hasta el revés de mí,
hasta la ciega condena de estos ojos que me impiden mirar
y que sólo atestiguan la división debajo de estos párpados.




Olga Orozco, M
useo Salvaje
















Man Ray, Las lágrimas (1930)

viernes, 11 de septiembre de 2009 6 Comentarios

Le cimetière marin (1920)

XXIII

Oui! Grande mer de délires douée
Peau de panthère et chlamyde trouée
De mille et mille idoles du soleil,
Hydre absolue, ivre de ta chair bleue,
Qui te remords l'étincelante queue
Dans un tumulte au silence pareil.



XXIV


Le vent se lève!... Il faut tenter de vivre!
L'air immense ouvre et referme mon livre,
La vague en poudre ose jaillir des rocs!
Envolez-vous, pages tout éblouies!
Rompez, vagues! Rompez d'eaux réjouies
Ce toit tranquile où picoraient des focs!


Paul Valéry






XXIII

Sí, mar, gran mar de delirios dotado,
Piel de pantera y clámide calada
Por tantos, tantos ídolos del sol,
Ebria de carne azul, hidra absoluta,
Que te muerdes la cola refulgente
En un tumulto análogo al silencio.

XXIV

El viento vuelve, intentemos vivir
Abre y cierra mi libro al aire inmenso,
Con las rocas se atreve la ola en polvo,
Volad, volad, páginas deslumbradas.
Olas, romped gozosas el tranquilo
Techo donde los foques picotean.


Traducción de Jorge Guillén

lunes, 7 de septiembre de 2009 15 Comentarios

HOLOCAUST

BIG STAR-HOLOCAUST

Your eyes are almost dead


Cant get out of bed


And you can't sleep




You're sitting down to dress

And you're a mess

You look in the mirror



You look in your eyes

Say you realize



Everybody goes

Leaving those who fall behind

Everybody goes

As far as they can,

They don't just care.



They stood on the stairs

Laughing at your errors

Your mothers dead

She said, don't be afraid.



Your mothers dead

You're on your own

She's in her bed



Everybody goes

Leaving those who fall behind

Everybody goes

As far as they can

They don't just care

You're a wasted face

You're a sad-eyed lie

You're a holocaust.



*


domingo, 30 de agosto de 2009 14 Comentarios






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Bucear en cada nota. Mi respiración. Entrecortada la vida. No nos quedará más. Se nos va. De las tres palabras un dolor extraterreno. Todo se nos va. Incluso nosotros, suplicando su maldito regreso. Por favor, por favor. De toda súplica nace mi escorbuto.

miércoles, 26 de agosto de 2009 10 Comentarios

Silencio
Fábula
Edgar Allan Poe
Las crestas montañosas duermen;
los valles, los riscos y las grutas están en silencio.

(ALCMAN 160 (1O), 6461)

—Escúchame — dijo el Demonio, apoyando la mano en mi cabeza—. La región de que hablo es una lúgubre región en Libia, a orillas del río Zaire. Y allá no hay ni calma ni silencio.
Las aguas del río están teñidas de un matiz azafranado y enfermizo, y no fluyen hacia el mar, sino que palpitan por siempre bajo el ojo purpúreo del sol, con un movimiento tumultuoso y convulsivo. A lo largo de muchas millas, a ambos lados del legamoso lecho del río, se tiende un pálido desierto de gigantescos nenúfares. Suspiran entre sí en esa soledad y tienden hacia el cielo sus largos y pálidos cuellos, mientras inclinan a un lado y otro sus cabezas sempiternas. Y un rumor indistinto se levanta de ellos, como el correr del agua subterránea. Y suspiran entre sí.
Pero su reino tiene un límite, el límite de la oscura, horrible, majestuosa floresta. Allí, como las olas en las Hébridas, la maleza se agita continuamente. Pero ningún viento surca el cielo. Y los altos árboles primitivos oscilan eternamente de un lado a otro con un potente resonar. Y de sus altas copas se filtran, gota a gota, rocíos eternos. Y en sus raíces se retuercen, en un inquieto sueño, extrañas flores venenosas. Y en lo alto, con un agudo sonido susurrante, las nubes grises corren por siempre hacia el oeste, hasta rodar en cataratas sobre las ígneas paredes del horizonte. Pero ningún viento surca el cielo. Y en las orillas del río Zaire no hay ni calma ni silencio.
Era de noche y llovía, y al caer era lluvia, pero después de caída era sangre. Y yo estaba en la marisma entre los altos nenúfares, y la lluvia caía en mi cabeza, y los nenúfares suspiraban entre sí en la solemnidad de su desolación.
Y de improviso se levantó la luna a través de la fina niebla espectral y su color era carmesí. Y mis ojos se posaron en una enorme roca gris que se alzaba a la orilla del río, iluminada por la luz de la luna. Y la roca era gris, y espectral, y alta; y la roca era gris. En su faz habla caracteres grabados en la piedra, y yo anduve por la marisma de nenúfares hasta acercarme a la orilla, para leer los caracteres en la piedra. Pero no pude descifrarlos. Y me volvía a la marisma cuando la luna brilló con un rojo más intenso, y al volverme y mirar otra vez hacia la roca y los caracteres vi que los caracteres decían DESOLACION.
Y miré hacia arriba y en lo alto de la roca había un hombre, y me oculté entre los nenúfares para observar lo que hacía aquel hombre. Y el hombre era alto y majestuoso y estaba cubierto desde los hombros a los pies con la toga de la antigua Roma. Y su silueta era indistinta, pero sus facciones eran las facciones de una deidad, porque el palio de la noche, y la luna, y la niebla, y el rocío, habían dejado al descubierto las facciones de su cara. Y su frente era alta y pensativa, y sus ojos brillaban de preocupación; y en las escasas arrugas de sus mejillas leí las fábulas de la tristeza, del cansancio, del disgusto de la humanidad, y el anhelo de estar solo.
Y el hombre se sentó en la roca, apoyó la cabeza en la mano y contempló la desolación. Miró los inquietos matorrales, y los altos árboles primitivos, y más arriba el susurrante cielo, y la luna carmesí. Y yo me mantuve al abrigo de los nenúfares, observando las acciones de aquel hombre. Y el hombre tembló en la soledad, pero la noche transcurría, y él continuaba sentado en la roca.
Y el hombre distrajo su atención del cielo y miró hacia el melancólico río Zaire y las amarillas, siniestras aguas y las pálidas legiones de nenúfares. Y el hombre escuchó los suspiros de los nenúfares y el murmullo que nacía de ellos. Y yo me mantenía oculto y observaba las acciones de aquel hombre. Y el hombre tembló en la soledad; pero la noche transcurría y él continuaba sentado en la roca.
Entonces me sumí en las profundidades de la marisma, vadeando a través de la soledad de los nenúfares, y llamé a los hipopótamos que moran entre los pantanos en las profundidades de la marisma. Y los hipopótamos oyeron mi llamada y vinieron con los behemot al pie de la roca y rugieron sonora y terriblemente bajo la luna. Y yo me mantenía oculto y observaba las acciones de aquel hombre. Y el hombre tembló en la soledad; pero la noche transcurría y él continuaba sentado en la roca.
Entonces maldije los elementos con la maldición del tumulto, y una espantosa tempestad se congregó en el cielo, donde antes no había viento. Y el cielo se tornó lívido con la violencia de la tempestad, y la lluvia azotó la cabeza del hombre, y las aguas del río se desbordaron, y el río atormentado se cubría de espuma, y los nenúfares alzaban clamores, y la floresta se desmoronaba ante el viento, y rodaba el trueno, y caía el rayo, y la roca vacilaba en sus cimientos. Y yo me mantenía oculto y observaba las acciones de aquel hombre. Y el hombre tembló en la soledad; pero la noche transcurría y él continuaba sentado.
Entonces me encolericé y maldije, con la maldición del silencio, el río y los nenúfares y el viento y la floresta y el cielo y el trueno y los suspiros de los nenúfares. Y quedaron malditos y se callaron. Y la luna cesó de trepar hacia el cielo, y el trueno murió, y el rayo no tuvo ya luz, y las nubes se suspendieron inmóviles, y las aguas bajaron a su nivel y se estacionaron, y los árboles dejaron de balancearse, y los nenúfares ya no suspiraron, y no se oyó más el murmullo que nacía de ellos, ni la menor sombra de sonido en todo el vasto desierto ilimitado. Y miré los caracteres de la roca, y habían cambiado; y los caracteres decían: SILENCIO.
Y mis ojos cayeron sobre el rostro de aquel hombre, y su rostro estaba pálido. Y bruscamente alzó la cabeza, que apoyaba en la mano y, poniéndose de pie en la roca, escuchó. Pero no se oía ninguna voz en todo el vasto desierto ilimitado, y los caracteres sobre la roca decían: SILENCIO. Y el hombre se estremeció y, desviando el rostro, huyó a toda carrera, al punto que cesé de verlo.
Pues bien, hay muy hermosos relatos en los libros de los Magos, en los melancólicos libros de los Magos, encuadernados en hierro. Allí, digo, hay admirables historias del cielo y de la tierra, y del potente mar, y de los Genios que gobiernan el mar, y la tierra, y el majestuoso cielo. También había mucho saber en las palabras que pronunciaban las Sibilas, y santas, santas cosas fueron oídas antaño por las sombrías hojas que temblaban en torno a Dodona. Pero, tan cierto como que Alá vive, digo que la fábula que me contó el Demonio, que se sentaba a mi lado a la sombra de la tumba, es la más asombrosa de todas. Y cuando el Demonio concluyó su historia, se dejó caer en la cavidad de la tumba y rió. Y yo no pude reírme con él, y me maldijo porque no reía. Y el lince que eternamente mora en la tumba salió de ella y se tendió a los pies del Demonio, y lo miró fijamente a la cara.

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Ausencia

lunes, 17 de agosto de 2009 12 Comentarios

Prosa holística

Manuel Álvarez Bravo





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Todo llueve salado; el tiempo se difumina en las nubes del norte, que se pudre con el agua de las lágrimas supuradas por los días. Las frases se me alargan en las tertulias que conciernen mis labios en cada letra, haciéndole el amor al verbo para comprender el misticismo del significado que encierran las casas. La habitación está sin pintar, desde hace casi más de un año. El silencio del padre indica que nos estamos muriendo. Uno en el otro, sin compasión ni ternura. El alarido por la escritura, un grito a ciegas, un laberinto sin Ícaro diventa vacío. VUOTO. Y sólo hay uno que lo echará de menos. Los funambulistas aman sus cuerdas, se financian con y por el Vértigo. Los demás miramos y decimos: también queremos la V. Y sin querer me equivoco en un acento. Lo demás son sorbetes de limón y esperas encadenadas. Quiero un vuelo, digo, quiero un soplo, suspiro, y mi corazón al aspaviento se difumina, y el tiempo diventa negro, negro, negro... en cada una de las estaciones (de ferrocarril). Al tiempo del cañón se ralentizan mis extremidades; rotas, se esparcen sus cenizas por la calzada mugrienta. Y no da Tiempo al Grito. Las rodillas se me incan, y no sé cómo consigo alcanzar la atemporalidad del cielo, donde, allá en el fondo, me esperan todos mis ecos. Ferro-carril. Cañón y cuerpo caído. Las vías me seducen el cuerpo y la sangre me salpica los recuerdos. La idea se evapora en mi lengua. No queda más silencio que la prolongación del sonido.

domingo, 9 de agosto de 2009 10 Comentarios

Busca lo que está escondido


KLIMT

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Fronteras inútiles

un lugar
no digo un espacio
hablo de
qué

hablo de lo que no es
hablo de lo que conozco


no el tiempo
sólo todos los instantes
no el amor
no

no

un lugar de ausencia
un hilo de miserable unión.


Alejandra Pizarnik

sábado, 8 de agosto de 2009 5 Comentarios

Un segundo

Es bien sabido que tras la pausa comienza el montaje.

Eternizar la pausa. Realizarse en el segundo. Último. Después, echar de menos.

Eres mi pausa. El mundo es el movimiento. El daño. Busco la eternización secular en el segundo confinado al olvido. Me manca cada engranaje movido. Quiero un vuelo. Un soplo. Que no haya materia donde me muevo. Porque mi movimiento rasga las paredes de la casa. Porque aquí el verbo no es pequeño. Es mi aire. Yo soy en el verbo. En la pausa, hay anche palabras.

Realizarme en cada nota de una melodía de segundos. De puntos que cosen la herida. En cada oscuridad que forma una imagen, la muerte. Súbita desaparición del color. Y el blanco se come al mundo. Un segundo. Otro. Otro.

El grito de las líneas. Cada verso es pánico. Verdad. Ausencia. Segundo. La muerte en una Sustancia. Tu gravedad y la mía compartidas en el vórtice del vértigo que me consume
Lacera
Hierve
Dentro,

DIETRO LE PAROLE

Un grito, otro, segundos, voces, luces, blanco, explosión inaudita. Morir en el silencio / también hay palabras / una mano, y c a d a s e g u n d o s e f r a g m e n t a s i n s i l e n c i o s

donde
cuando
porque

sin preguntas

Una caída torpe
en cada sílaba.
Exprimir la necesidad de infinitud.


Y la música no se siente
lo suficiente.

domingo, 2 de agosto de 2009 9 Comentarios

Esto nunca fue un poema

"Sólo quise el silencio de los atardeceres;
me di cuenta de que jamás hubo más palabras que una imagen.
En tantas ocasiones.
No hay nada vacío, me he dado cuenta al formular la palabra Deseo.

Nunca pensé que necesitara una buena novela con tanto ahínco.

* * *

De llenar la botella sin que haya un genio.
En eso consiste, supongo.
Y en no conseguir nada.
Quedarse vacío,
para seguir explorando.

Si me canso de explorar
me muero.

Soy como las estrellas. Pero no formo parte de la constelación de nadie.
Todo es demasiado triste como para resucitar. Por eso los muertos no vuelven.
No hay Deseo entonces. Ni deseos de desear.

Todo está aparentemente hueco.

Y ojalá las palabras fueran imágenes,
y mis imágenes
estrellas."

martes, 14 de julio de 2009 12 Comentarios

El gran salto


Llamémosle "El gran salto".

De aquí a los años, nos quedan los segundos del sueño.

Y acaba pasando

que no saltamos.


El tren suena
a amaneceres

lunes, 6 de julio de 2009 8 Comentarios

LA CREACIÓN I



Malditos de dios












Bienvenidos al Pecado Original


















Que todos se sientan agusto









es propio de la manzana.





















William Blake






Bosco








Dore







Fuseli




jueves, 2 de julio de 2009 6 Comentarios

En busca de la realidad II

Galileo Chini

Una pestaña dormida
Un ataúd de recuerdos.
Porque nadie pide serlo.


6 Comentarios

A la búsqueda de lo real I

DES CHANSONS

"It's true I always wanted love to be
Hurtful
And it's true
I always wanted love to be
Filled with pain
And bruises
Yes, so Cripple-Pig was happy
Screamed
"I just compeletely love you!
And there's no rhyme or reason
I'm changing like the seasons Watch!
I'll even cut off your finger" "

http://www.youtube.com/watch?v=4upckEHgRGI


"Mr. Muscle, gazing boredly
And he checking time did punch me
And
I sighed and bleeded like a windfall
Happy bleedy, happy bruisy
I am very happy
So please hit me
I am very happy
So please hurt me
I am very happy
So please hit me
I am very very happy
So come on hurt me "


http://www.youtube.com/watch?v=mZS9gTQNE1Y

"Cuanto me cuesta sobrevivir
cuanto sonreír
sin poder quitarme el antifaz
que me disfraza de normal.
Y volveré a buscarte
Allí hasta donde estés..."


http://www.youtube.com/watch?v=BWV4N-ZcDJg&feature=related

9 Comentarios

Au Nord


NERE EKIALDEAN

Urdina itsasoari irailak eman zion,
Eta itasoak nerekin kaio bat egin zuen,
Orobat itsaso den kaioa.

Ortzimugaren bila doan treineruarekin batera,
Helmugarik gabeko ekitaldira abiatzen naiz,
Eta arraunen uherak bezala,
Hiltzen eta birjaiotzen natzaio
Hegaldi bakoitzari,
Ezaugarririk utzi gabe,
Ez baitira loturak baino.

Ilunabarretan, harrabots antzuetatik
Iheska doazenekin elkartzen aniz,
Eta zalantzan diren kezkatiek
Itxaropenez elikatzen naute.

Bere bihotzean, mugagabetasunarekin
Batzen nauen hazia daramat,
Eta egunsenti berriak pizten ditu
Nere ekialdean.

Eta behin gauaren besoetan,
Isiltasunaren ahotsa aditzean,
Euria ari du nere begietan,
Errukirik jaso ez dutenen saminez
Beterik baitaude.

Urdina itsoari irailak eman zion
Eta itsasoak nerekin kaio egin zuen,

Orobat itsaso den kaioa.


Benito Lertxundi



NERE EKIALDEAN

Septiembre otorgó el azul a la mar,
y ella hizo de mí una gaviota,
que también es mar.

Junto a la trainera que busca el horizonte,
Vago sin propósito,
Y como las estelas de los remos
muero y renazco a cada bullicio estéril,
y los inquietos que dudan
me alimentan de esperanza.

Llevo en mi corazón
la semilla que me une al infinito,
y alumbra nuevos amaneceres
en mi oriente.

Y cuando la noche me acoge en su seno,
y percibo la voz del silencio,
llueve en mis ojos,
y es que están llenos de penas
de aquellos que no recibieron compasión.

Septiembre otorgó el azul a la mar,
y ella hizo de mi una gaviota
que también es mar.


Letras de: euskalnet.net

domingo, 28 de junio de 2009 23 Comentarios

Ravenous

*
ODIO Y AMO

Aquí herido de muerte

estoy. Aquí goteo

espesor animal y mudo llanto.

Aquí compruebo

la resistencia ciega de un latido

a la fría posibilidad del puñal.

Aquí pronuncio

la palabra que nunca

moverá una montaña.

Aquí levanto

inútiles barreras

que derriba la muerte.

Aquí libro batallas

contra el viento, incluso

contra un ángel (aún cojeo

hacia el lado de Dios).

Aquí y cada día

y cada hora y

cada segundo me he negado a morir.

Aquí odio la vida, sin embargo.

Odio cuanto levanta al aire

una frente o un pétalo.

Cuanto he besado, cuanto

he querido besar y ha sido

materia o voz de mi deseo. Odio

y amo. (Amo

con demasiado amor).

J. Á. Valente

MICHAEL NYMAN: Suite Ravenous*

martes, 23 de junio de 2009 16 Comentarios

Para que los labios no se pudran, moverlos

Hoy me he acordado de la belleza y la muerte; de las rosas cuando se marchitan; del jardín de delante de la casa fragante a mortandad. Aquella rosa ya no existe más que en mi memoria figurativa. Sus pétalos se han perdido para siempre en la savia de los árboles, entendidos como el recuerdo. Me queda la tenacidad desesperada en la espera encarnizada. Pero no es nada, comparado con la sustitución de la imagen.

Una moto ruge en la calle, luchando por arrancarme el pensamiento, y no logra más que rasgar mis pétalos, ya pequeños, ahora hijos de Dédalo. La tendresse est morte.

***

Imposible sentirme aquí ni siquiera un instante. Siento que la tierra se me despega, y el sol, me llama a su cercanía, incompleta sin la plenitud de su función extrema. Je sens que la terre se me décolle. “Es siempre lo que amaba ser”. La sincronicidad del tiempo de tus frases, quiebran tu voz hasta hacerla arco de violín de hojalata. Un arco que pasa por encima de los pétalos, blandos, lágrimas de la vida que se van dejando en la cuesta de descenso.

“No nos quedara si no más que el tiempo.” Lo que se tarde en ascender al sol, y dejarse consumir por sus llamas. No hay cosas bellas ya a las que amar; todo es incandescente, inflamable a la mirada que busca tenaz la respuesta en la música, la imagen, y las palabras. Siempre en la palabra se cree que yace dormida la verdad, pero; La bellezza è morta. El hombre se ha machacado los ojos, ha extirpado su deseo. Les oiseaux.

Deshacerse de lo superfluo, flotar en el agua y no dejar que el agua flote en uno mismo.

***

Me puede mi propio peso en esta dimensión ajena de mí en su totalidad. Flotar en medio de ninguna parte, sin reconocer los rostros ni las palabras, de idas y llegadas fuera del tiempo se llena la cotidianidad, de pérdidas y ningún encuentro, acaban por moverse lengua-dientes-labios-seno-lento, despacio. Todo parece un caldero rebosante de merde, y un escupitajo más no calmara la ira que arrasa, como el fuego, con todos los hermosos pétalos.

Sólo una palabra para alcanzar la mirada, acariciar los oídos, y decirle al daño “¡ya basta!”

No llega; por más que imagine su trayecto, la lentitud del verbo sobrepasa a Cronos, y todos acabamos perdiendo la caput. Que rueda a ninguna parte.

jueves, 18 de junio de 2009 12 Comentarios

Ils sonnent


When I sing I can't bring everything on the wing
Flying down from dizzy air
To the ground because I care

You will be love and your love will live

When I smile I beguile all the while every mile
As I walk across the sky of the clockwork of your eye
You will be love and your love will live

Casting spells from the well
I can tell you the bells
listen to my magic voice
Learn the tune of children's toys

You will be love and your love will live

When I die do not cry hear my sigh passing by
after I have turned to win I will try to help you then
You will be love and your love will live


Tim Buckley




~


Y con el último Fuego del día
acabó por extinguirse mi Tarde.

domingo, 14 de junio de 2009 12 Comentarios

Tártaro

De un salto, te allegas
a la bendita euforia
del sueño.
[...]
Son los tobillos de la noche
Con el hueso al descubierto
Y estrellas
En su sangre colorada.
[...]
La noche, no duerme.

jueves, 11 de junio de 2009 13 Comentarios


"J'ai changé cent fois de nom,
j'ai perdu femme et enfants
mais j'ai tant d'amis;
j'ai la France entière"
"Chez moi"
*
*
*


Suena a sentencia, mientras yo vuelvo a alejarme;
Puede que regresen las palomas
alguna vez.
Con la noche
el frío
que devora
las sábanas.

Nunca llegaste a los labios.

lunes, 8 de junio de 2009 12 Comentarios

Der Kuss~Liebestraum


Besos de cristal
caídos.

Un ángel cae desde el tiempo, y Cupido que tiende el hilo, guarda su pie con cierto anhelo, cuidándose de la intermitencia de sus labios en el mortal abrazo.

2029

Para calmar el hambre, los labios necesitan de una caricia que les devuelva su mismo tacto.

viernes, 5 de junio de 2009 11 Comentarios

De los caminos inescrutables de las líneas

Ahí suena el mar, ¿lo oyes? sólo yo puedo escucharlo.
 
El tiempo vira al fondo, a lo más hondo, perdiéndose para siempre en la lejanía.
No hay nunca, ni siempre entonces, que equivalga a mi ahora. Puede ser que me llame con su rugido de lamentos, puede ser que arranque el cable del teléfono y diga "nunca más". Saldré a la calle, a escuchar como canta Casualidad en la esquina donde orinan los perros; Casualidad me miraría corrompida por mi gesto de caminar sobre cristales amarillos, Casualidad quebraría la última nota de su voz, imperceptible momento, no para aquella que se aleja, para seguir cantando al día de nubes esponjosas.
Las calles resbalarían a lluvia, la vida olería mojada y yo húmeda, recordando aquellos días con sabor a mar. Me seguiría llamando más allá del espacio con su silencio de sal ahogada.
 
El tirón del gatillo sobre mi cuello, la sangre que explota en llamaradas en la suite del infierno callado. El ligamento se hincha en la caída, al ruido producida; el suelo recoge angelado el cuerpo tatuado en el reflejo del cadáver; el cielo se abre y se muestra rojo, rojo como sólo es el cielo en la línea que marca en los labios el tiempo.
 
Casualidad canta, y el tiempo se aleja reguero atrás, bailando a romperse.

viernes, 29 de mayo de 2009 8 Comentarios

De una carta tirada sobre la mesa sale una línea que corre por la plancha de pino y baja por una pata. Basta mirar bien para descubrir que la línea continúa por el piso de parqué, remonta el muro, entra en una lámina que reproduce un cuadro de Boucher, dibuja la espalda de una mujer reclinada en un diván y por fin escapa de la habitación por el techo y desciende en la cadena del pararrayos hasta la calle. Ahí es difícil seguirla a causa del tránsito, pero con atención se la verá subir por la rueda del autobús estacionado en la esquina y que lleva al puerto. Allí baja por la media de nilón cristal de la pasajera más rubia, entra en el territorio hostil de las aduanas, rampa y repta y zigzaguea hasta el muelle mayor y allí (pero es difícil verla, sólo las ratas la siguen para trepar a bordo) sube al barco de turbinas sonoras, corre por las planchas de la cubierta de primera clase, salva con dificultad la escotilla mayor y en una cabina, donde un hombre triste bebe coñac y escucha la sirena de partida, remonta por la costura del pantalón, por el chaleco de punto, se desliza hacia el codo y con un último esfuerzo se guarece en la palma de la mano derecha, que en ese instante empieza a cerrarse sobre la culata de una pistola.

Julio Cortázar

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Photo: Jonah and the whale, Pamplona Bible

Jonah, Pamplona Bible, Navarre 1197. Amiens, Bibliothèque municipale, ms. 108, fol. 146r .